La Empresa

Somos una empresa familiar que elabora hidromieles artesanales desde el año 2000. Nos valemos de las mejores materias primas para elaborar productos que dejen una impresión digna y sincera en cada paladar que nos descubre y se anima a conocernos. Gracias a las excelentes mieles de monte de San Marcos Sierras, a las levaduras seleccionadas y al cuidado y control en los distintos procesos… nuestros clientes nos han retribuido y elegido una y otra vez.

Pero nuestra historia no comienza en el año 2000 realmente. Para comprender en profundidad todo lo que contiene cada botellas que envasamos, su esencia y su carga simbólica, debemos irnos mucho más atrás en el tiempo. Es más… hasta debemos cruzar el océano…

Se puede decir que la historia de Hidromiel del Viejo San Marcos comienza en un lugar y tiempo lejanos.
Corre el año 1930 en Swyslodz, un pueblo del norte de Polonia (actualmente Svislač, Bielorrusia). Abraham solo tiene 6 seis años y distribuye su tiempo entre el estudio, los juegos y los quehaceres hogareños. Le gusta ayudar a su abuelo Kantor en la tradicional tarea de elaborar la hidromiel que la familia consume en fiestas y celebraciones. Todos estos conocimientos serán para Abraham un tesoro que llevará por siempre. Como tantos, Abraham huye de la guerra con su familia hacia Argentina, llevando con sigo esos invalorables recuerdos.
Pasado el tiempo, Abraham decide revivir la tradición de su abuelo y de su familia. Se pone a elaborar hidromiel por el simple hecho de evocar esos años de infancia.
Y así regresamos al año 2000. Sylvia, su cuñada, toma la iniciativa y conjuntamente desarrollan lo que hoy conocemos como Hidromiel del Viejo San Marcos.

 

Y así es como cuentan ellos su propia historia »